domingo, junio 30, 2013

A ENTERRAR LA IDEA DE PRISIÓN PERPETUA A VIOLADORES Y ASESINOS DE NIÑOS

La muerte de las personas afecta a sus allegados y a quienes le predicaban admiración. Preservar su obra, recordar su vida, seguir sus pasos son promesas que se suelen hacer en memoria del ausente, y algunas veces se materializan. Se crean competencias, premios o fundaciones para recordar al ídolo, artista al líder. Creo que sería infortunado hacer esto con Gilma Jiménez, la “Senadora de los niños”' en su intento de establecer la cadena perpetua.

Su elección fue un caso muy particular. Sin gran bagaje político obtuvo una votación solo alcanzable para los referentes ideológicos partidistas: su votación en 2010 igualó a la de Jorge Enrique Robledo y sólo quedó detrás de Juan Lozano. El respaldo popular por ella logrado sólo está al alcance de políticos de la talla de Gustavo Petro, Germán Vargas Lleras o Carlos Gaviria.

La clave de su éxito fue sencilla: un pasado transparente, un propósito loable superior a cualquier disputa política y una abnegación única en lograrlo. La violación y asesinato de niños y niñas son probablemente las conductas más execrables para el pueblo colombiano, que es capaz incluso de justificar la muerte. Ante una oleada de casos profundamente dolorosos, vigorosa ella se alzaba como la única capaz de ponerle fin a través de una reforma constitucional que posibilitara punir con prisión perpetua tales acciones.

Pero la propuesta de Gilma tenía en sí misma el germen que la hizo una con cualquier padre de la patria: creer a fe ciega que con aumentar las penas cesarán los delitos. Tiene vicios de pandemia: no falta más sino que los noticieros den una seguidilla de reportajes sobre este u otro delito para que raudos los congresistas presenten proyectos de ley aumentando las penas. ¡Hasta han pensado en volver por ley doloso el homicidio cometido por conductores borrachos!

En cuanto no son idóneos para cumplir sus objetivos, propuestas como la de Gilma Jiménez resultan irracionales. La función preventiva a cargo del Derecho penal se ejerce con la imposición efectiva de penas, no con el aumento del quantum sancionable. Entre más prontas y seguras sean mejor función cumplen. He allí el problema que debe ser solucionado.

Un sistema judicial paquidérmico como es el colombiano, lleva a que los delincuentes no teman a las sanciones penales. Confían en que no serán descubiertos, y si es del caso las gabelas legales les dejarán libres. Sólo en cuanto ven que ese sistema funciona, por meter a la cárcel a quien delinque la voluntad delincuencial puede resultar doblegada. Este postulado lejos de ser novedoso fue planteado por Beccaria en el siglo XVIII.

Tan detestable es el señor Luis Alfredo Garavito, como el sistema judicial y policial incapaz de detenerlo. Hacer más efectiva a la justicia es apenas una de las necesidades para proteger a los niños. La sociedad debe concursar con la interiorización de valores, y no aceptando la negación del individuo.

Así es conveniente enterrar a la idea de imponer prisión perpetua a violadores y asesinos de niños, claro sin la dignidad que merece Gilma.

lunes, junio 24, 2013

UN MUNDO SIN DEMOCRACIA

Los casos de Julian Assange y Edward Snowden son un puro contrasentido. Ambos de manera aislada decidieron darlo todo por un mismo propósito: develar cómo los Estados –en especial EE.UU. la superpotencia global– espiaban a las personas, sin que importasen si fuesen nacionales o no, en aras de brindar seguridad a los intereses que se erigen tras ellos, que particularmente se vinculan a los poderosos.   
Ellos de manera valiente, más que ninguno que pueda leer este modesto blog u opinar del tema, sacaron a la luz archivos clasificados como secretos de las agencias de seguridad para desenmascarar ese adalid de los derechos del hombre que desde el siglo XVIII campea por el mundo. Aun sin ejércitos saben que como Aníbal Barca tendrán que correr por el resto de sus vidas, lo que nunca será suficiente, para escapar del imperio global dominante.
Hostigados por el poderoso acuden ante sus enemigos en busca de protección. ¿Es ello correcto? No puedo increpar a quien ha dado mucho más de lo que yo estaría dispuesto a ofrecer por ejercer la libertad, aun para después terminar en países donde ésta es más efímera. También lo saben: es el precio de vivir en un mundo sin democracia.
Que nadie se rasgue las vestiduras. La supuesta criminalidad que el Gobierno norteamericanos endilga en las conductas de Assange y Snowden es tan consistente como la libertad que dicen ofrecer regímenes como los de Ecuador, Venezuela o Rusia. Las normas legales lo encubren todo. Alguna vez escuché a una disidente cubana decir que había preferido estudiar física a derecho, pues se había dado cuenta que los números eran menos maleables que las leyes.
¿Por qué ningún país se ofrece a acoger a Assange y Snowden por la probidad de sus conductas y no por el odio al enemigo común? ¿No hay un país que se levante en protección de ellos sin que a su vez mancille la dignidad sus propios críticos? Parece que la eterna lucha entre libertad y poder no puede saldarse en favor del primero.

lunes, junio 10, 2013

El ganador del Tour de Francia de 2015

Dice que pensaba ser soldado, como su hermano mayor. Garantizaría un salario fijo y su vinculación a la seguridad social. Pero, como a tantos en este país, la pobreza se atravesó en su camino. Como hermano mayor –dentro de los que aun estudiaban– debía ceder su puesto en el bus a los menores para ir al colegio, yendo él en una bicicleta, de acero, pesada como ella sola y, seguro, con unos cambios de risa. 15 kms desde Cómbita hasta Arcabuco, de ida pura bajada de vuelta puro ascenso.

Esas necesidades de la vida llevaron a que casualmente de regreso a su casa se encontrará con equipos ciclistas de su región mientras entrenaban. A pesar de no tener el uniforme de fatiga respectivo, ni una bicicleta apropiada, ni choclos ni nada de eso, dejaba a muchos en el camino y era de los pocos que llegaban primeros a la cima.

Su padre no tenía para pagar la inscripción en las competencias juveniles de la región. Daba su palabra de pagarla con el premio que le darían a su muchacho por ganar la competencia. Siempre cumplían. Así terminó enrolado en el equipo “Boyacá orgullo de América”. Dicen que tuvieron que repetir varias veces la prueba de esfuerzo para verificar que la maquina no estuviese dañada. Aunque solo tenía 19 años Europa lo veía ganador de las clasificaciones de los sub-23 donde corriese. La subida a Urkiola en 2009 especialmente vio sus primeros destellos.

Habría que llevarlo al Tour de l'Avenir, para que el equipo colombiano cuajará por fin una buena actuación después de los intentos infructuosos de los años anteriores. Ganó dos etapas y la clasificación general. Lideró el triunfo más brutal del ciclismo colombiano en Europa: campeón por equipos, tres hombres en el Top Ten incluyendo a Pantano en el tercer lugar, quien tuvo que heredar la camiseta de la montaña de Esteban Chávez retirado por una caída a dos jornadas del final. Dicen que como Alfonso Flórez y Patrocinio Jiménez se dieron golpes con los europeos.

Al año siguiente en la Volta a Catalunya, su primera competencia World Tour, ganó la clasificación de la montaña y acompañó a Alberto Contador en el pódium final. Su explosión vino en 2012, con el Movistar. Fue ganador desde febrero a octubre, obteniendo triunfos para un debutante que en número solo son alcanzables para los mejores embaladores. En España, Francia e Italia lo vieron en lo más alto seis veces, incluyendo dos clasificaciones finales y una clásica montañosa. La joya de la corona de aquel año fue la etapa con llegada a Morzine con el Joux Plane a 10 kms del final.

A finales de temporada corrió la Vuelta a España y obtuvo algo que solo le fue reconocido a Peter Sagan en el Tour: son de los pocos ciclistas que ganan la primera etapa de la primera gran vuelta que corren en su vida. Sí, al fin y al cabo él entró con su equipo para registrar el tiempo triunfador en la CRE de Pamplona. La primera semana de competencia no fue la mejor, pero en las siguientes dio espectáculo: los lagos de Covadonga, Citu Negru y Fuente Dé vieron sus mejores presentaciones, siempre en apoyo de su líder Alejandro Valverde, quien sabe que no dentro de mucho, por edad y sobre todo por condiciones perderá esa posición.

Este año su número de victorias han disminuido pero su calidad ha aumentado: sólo en el World Tour. Empezó barriendo el pelotón en la Vuelta a Andalucía para Valverde. En la Paris-Niza a causa de una caída se vio relegado de la lucha por la clasificación general. Sin el tiempo perdido por el percance habría sido tercero. Su revancha parecía venir en la Volta a Catalunya, donde obtuvo una victoria parcial, pero el último día a causa de una emboscada y un tanto de desatención se le fue el tercer lugar de la general.  Estas derrotas son las que engrandecen a un ciclista, pues en éste deporte como pocos la derrota es condición para hacerse ganador.

Pero lo que puso al mundo ciclista europeo de pie fue el sorpresivo triunfo en la Vuelta al País Vasco. Fue incluido en el equipo faltando dos días para el final y ni el mismo Eusebio Unzué esperaba su victoria. En todas las etapas estuvo adelante, ganó de vivo en Arrate, pelando siempre el liderato con Sergio Luís Henao. Para la etapa final –una contrarreloj individual un tanto quebrada– toda Europa esperaba su descalabro. Al fin y al cabo era escalador y colombiano para peor. Porte ganaría fácilmente, decían pues tenía su mismo tiempo. Los augurios no se cumplieron y el colombiano le ganó por 23 segundos. Y anótese algo más: es la primera victoria en una clasificación general de un colombiano desde que existe el circuito Pro/World Tour.

Christian Prudhomme –Director del Tour de Francia– se frota las manos al imaginar lo que él podría hacer, por lo que le ha pedido públicamente a Euzebio que le lleve a la ronda gala, que será este año. Sabe como muchos en Europa, que el futuro del ciclismo en parte corre por sus pies. Euzebio sabe lo que tiene en sus manos, él es su ojito derecho y quiere llevarlo en la mejor condición al Tour de este año, para que sus 23 años no pesen en la tercera semana. Por ello no ha corrido ni la Dauphiné Libéré ni la Vuelta a Suiza, donde se suele preparar el Tour de Francia.

En principio va condicionado por deber trabajar para Valverde, pero la carretera pone a cada uno en su sitio y más en el Tour de Francia. Con cierta libertad podría hacerse el maillot de montaña y dos etapas: ¡Sería realmente bello que ganará en Alpe D’Huez!

En todo caso éste y el otro año son de aprendizaje. Es en 2015 cuando debe ganar, pues a los 25 años o antes han ganado el Tour quienes la historia ciclista recuerda: Andy Schleck, Alberto Contador, Greg LeMond, Bernard Hinault, Eddy Merckx, Felice Gimondi, Charly Gaul y Jacques Anquetil.

Este ha sido Nairo Quintana, el ganador del Tour de Francia de 2015.